enero 12, 2014

LA GRAN FIESTA AVELLANEDIANA

 
 
¡Ya viene llegando...!
 

Una Feria Internacional del Libro, un concurso de carteles, y otro poético, la inauguración de una estatua de “colosales” dimensiones, la venta de su casa natal al mejor postor, obras de teatro, reedición de sus obras, placa conmemorativa, coloquio internacional, ruta literaria… Ya lo dijimos hace tiempo, y es lógico: los actos por el bicentenario del natalicio de Gertrudis Gómez de Avellaneda no han hecho más que comenzar a ambos lados del océano. Las editoriales calientan motores. Es la gran fiesta avellanediana, algo que nos complace profundamente.

 
El año pasado, durante la clausura de la 22 Feria Internacional del Libro de La Habana se dijo, al anunciar la presente edición a celebrar en breve, que:

 
       La 23 Feria Internacional del Libro Cuba 2014 se realizará del 13 al 23 de febrero en La Habana y hasta el 9 de marzo en las demás provincias del país bajo el lema Leer es crecer. La próxima Feria del Libro estará dedicada a Ecuador, como país invitado de honor, y a los escritores cubanos Nercy Felipe y Rolando Rodríguez, según anunciaron durante la clausura de la edición 22.

 
Todo parece indicar que los organizadores de la Feria se olvidaron entonces que en 2014 se celebraría el bicentenario del natalicio de la divina Tula porque ni siquiera la mencionaron. Y no fue hasta el pasado diez de enero que pudimos leer, según una escueta nota oficial de Prensa Latina (PL), que la 23 Feria Internacional del Libro rendirá homenaje al bicentenario del natalicio de la famosa escritora, cuya nacionalidad –recalcan- suscita cierto debate entre Cuba y España. Debate que para nosotros no tiene lugar porque la Avellaneda más que cubana o española es Hispanoamericana, o sea, ambas cosas fundidas en una misma, y las dos a la vez.

 
En cuanto a la 23 Feria Internacional del Libro, el blog La divina Tula ya estaba enterado del homenaje que se le tributará porque habíamos cruzado grata información (amena y cordial) con los organizadores del citado homenaje que es en realidad el portal http://www.cubaliteraria.cu y no la Feria en sí misma. Por cierto el mencionado portal sí que informó desde hace tiempo sobre el homenaje que se tributará a la Avellaneda.

 
En la nota oficial que publica Prensa Latina nos ha llamado la atención que Letras Cubanas vaya a reeditar, frente a otras obras de capital importancia, Diario de Amor de Alberto Ghiraldo, obra tremendamente polémica por su dudosa aparición, elaboración, edición y hasta manipulación realizada hace ochenta y cinco años. A propósito del tema, el blog La divina Tula dedicará en los próximos días un post especial analizando las circunstancias que rodearon la aparición de dicha “superchería”.

 
La nota de PL nos hace saber también que Antón Arrufat y Zaida Capote, estudiosos, tanto como nosotros, de la Avellaneda, abordarán en diferentes ponencias, lecturas de la novela SAAB. Nos gustaría informar a PL que SAAB es una marca de automóvil de gama muy alta que se fabrica en Suecia, y que la novela escrita por la Avellaneda se titula Sab, que es el nombre de su protagonista: un esclavo de raza negra que se enamora de Carlota la hija de su amo y que no corresponde a sus reclamos amorosos… Por cierto se trata de la primera novela antiesclavista, anterior incluso a Uncle Tom's Cabin de Harriet Beecher Stowe que apareció en 1851. Sab data de 1841, aunque comenzó a escribirse en 1836, cuando la Avellaneda vivía en La Coruña.

 
Parece que PL se equivoca más de lo deseado, no sabemos si por  información distorsionada que le llega o por desidia. El caso es que nos anuncia en la misma nota que la editorial Letras Cubanas publicará también el Devocionario íntimo de la Avellaneda. Imaginamos se refieran al Devocionario nuevo y completísimo en prosa y verso, publicado por vez primera en la ciudad de Sevilla en 1867. Si a esta obra es a la que se refieren, nos alegraríamos infinitamente porque sería la primera vez en la historia editorial cubana que se publicaría dicha monumental obra ¡Felicidades!

 
Deseamos a la 23 Feria Internacional del Libro una edición de lujo con afluencia multitudinaria de asistentes, así como difusión y ventas de todas sus obras.

 
Esperamos que el coloquio sobre la vida y obra, tanto como el homenaje que se le tribute a la Avellaneda durante la 23 Feria, zanje para siempre las infundadas dudas que se han sembrado históricamente sobre la que fue una de las más importantes poetisas, escritoras y dramaturgas del siglo XIX en Hispanoamérica.

 
Manuel Lorenzo Abdala

enero 06, 2014

YO ACUSO

2014, año del bicentenario avellanediano
 


Introducción:
 
Desde el mes de agosto y hasta finales de diciembre de 2013 realizamos una serie de post que titulamos PRELUDIO PARA UN ILUMINADO BICENTENARIO. Se trataba de una sucesión de acontecimientos en la vida de la famosa escritora Gertrudis Gómez de Avellaneda que estaban un tanto turbios y difuminados en el tiempo. El asunto ya lo hemos resuelto.
 
A partir de hoy, y hasta el día en que celebremos el bicentenario, explicaremos una serie de absurdas razones (divididas por temas), que han tratado de silenciar y menospreciar a una mujer ante la que todos deberíamos inclinarnos más que respetuosamente.
 
Para nosotros los actos por el bicentenario se convierten en momento de obligado recuerdo con el objetivo de perpetuar su memoria en el tiempo. Así lo hemos creído siempre y así lo llevaremos a cabo de manera encomiable con nuestros modestísimos recursos.
 
Una ilustre mujer inexplicablemente relegada a planos muy inferiores a su verdadera categoría como poetisa, dramaturga y como escritora de primerísima línea, “la más grande de los tiempos modernos”, según palabras de Marcelino Menéndez y Pelayo no pasará inadvertida en el año de su bicentenario. No lo vamos a permitir.
 
 
El silencio de una serie (I)
 
Desde dos mil once, año de la aparición en la Internet del blog sobre Gertrudis Gómez de Avellaneda, se le dedicó especial atención al rescate de la figura y de su obra, reclamando mayor atención y mejor trato por parte de las Instituciones que habían dejado de lado a tan prestigioso personaje. Sus orígenes,  ya lo hemos dicho, fueron la antesala por el bicentenario a celebrarse el 23 de marzo próximo, y también como respuesta a una necesidad de rendir tributo a quién tanto y tanto merece.
 
En 2010 habíamos escrito ya el guión para la TV (serie de diez capítulos) que resumía en apretada agenda, la extensa vida y obra de la que consideramos fue la más famosa escritora decimonónica del siglo XIX en toda Hispanoamérica (Sí, fue ella y no otras).
 
El guión partió de cierta pasión por el personaje y de una brillante idea-respuesta al encontrar información desvirtuada e irrespetuosa (según nuestro criterio) referida a la estancia de la escritora, dramaturga y poetisa en la ciudad de La Coruña entre los años 1836 y 1838.
 
A partir de aquí comenzaron una serie de incomprensibles tropiezos burocráticos que finalmente impidieron fuera posible la realización de la serie. Dieciocho productoras españolas, entre las que se encuentra la principal de TVE, no tuvieron en cuenta la importancia que pudiera tener la serie y su proyección internacional en el año del bicentenario. Eso fue hace cuatro años, y todo muy a pesar de que una productora francesa estaba tremendamente interesada en la parte que le correspondía, siempre y cuando una española respaldara el proyecto…
 
El argumento de la serie estuvo a mi cargo. Visité las más ilustres bibliotecas del país, y otros archivos de capital importancia. Estudié profundamente y comparé información de todo tipo... Sin darme cuenta me convertí en un abanderado investigador de la vida y obra de Gertrudis Gómez de Avellaneda.
 
El guión (abierto siempre a cambios según posibilidades reales de producción) fue obra mía y de Hortensia Domínguez Tolón, sin la cual, honestamente, me hubiera sido imposible dar importantes pasos a la hora de su conformación como obra audiovisual. Hortensia Domínguez Tolón (Tenchy) además de experimentada dramaturga y guionista de lujo, es historiadora. Y yo, además de director de obras audiovisuales, soy un incansable investigador histórico. Ambos dimos los obligados pasos que marcan los burócratas (los del Estado y los que representan a las empresas privadas de los Medios). No solo registramos la obra audiovisual para protegernos de esas hambrientas y voraces garras, sino que llegamos a contratar (en realidad contrató Tenchy, yo estoy en riguroso paro desde hace mucho tiempo) a un experimentado abogado, especialista en temas audiovisuales, que nos orientó en los pasos a seguir, y en consecuencia actuamos.
 
Tenchy y yo éramos el binomio perfecto ¿Qué falló entonces…? A día de hoy, a pesar de conocer los absurdos entresijos del mundillo audiovisual español, no llegamos a comprender los motivos del silencio o del mañana, mañana, mañana…
 
“El proyecto es muy interesante y bueno. Pero desgraciadamente estamos en crisis”. Esa fue la respuesta que siempre, siempre obtuvimos.
 
Ayer me he quedado de piedra (literalmente hablando) al leer en una revista de corte sensacionalista y de muy mal gusto que una productora de televisión realizará una serie sobre la vida y obra (¡¿obra?!) de una mujer que no vale un comino y que es la antítesis de La divina Tula.
 
Y hasta aquí hemos llegado en nuestro dilatado silencio.
 
 
Continuará…
 
 
Manuel Lorenzo Abdala